Daniel Máxima igualdad entre el campeón de la Premier League y el campeón de la Bundesliga.
Los representes deInglaterra y Alemania respectivamente, no se hicieron daño y terminaron igualando a unos (1-1), en un emotivo juego disputado bajo el marco de la segunda jornada del grupo «D», en esta fase de grupos de la Liga de Campeones.
Fue necesario esperar hasta el segundo tiempo para ver goles y para apreciar como el conjunto alemán se puso en ventaja con una anotación de Marco Reus (minuto 61′), tras aprovechar un groso error de la zaga defensiva. Igualó para los ingleses el polémico Mario Balotelli (89′ minutos), quien convirtió de pena máxima y dedicó su gol al portero rival.
El resultado final le permite a cada conjunto hacerse con un punto; punto que le permite al club alemán mantener su invicto, llegar a cuatro unidades y consolidarse en la segunda casilla del considerado grupo de la «muerte». Los ingleses por su parte, primera unidad que consiguen en esta edición del torneo continental y que los deja a cinco del líder Real Madrid, que en esta jornada goleó (1-4) al Ajax.
Tal y como se esperaba desde el mismo momento en el que se anunció este vibrante duelo, los dos conjunto nos regalaron una de las primeras partes más entretenidas de las que se han disputado en esta edición de la Champions. Pese a que el resultado del primer episodio fue un empate a cero goles, los constantes ataques, las determinantes atajadas de los porteros y el dinámico ritmo en el que se desarrollaron las acciones, pagaron sin duda alguna hasta ese momento el valor de la boleta.
La lluvia y el animo de los miles de aficionados que se dieron cita en el «City of Manchester Stadium», permitieron el rápido desarrollo de unos vibrantes, rápidos y emotivos primeros 45 minutos de partido.
Para el periodo complementario no cambiaron muchos las cosas. Salvó que el conjunto visitante logró ponerse rápidamente con ventaja en el marcador gracias a un error garrafal de Kompany que aprovechó Marco Reus, para definir con tranquilidad en la acción final. Cuando parecía que todo sería victoria de los alemanes, Sergio Agüero remató a puerta y el balón terminó en la mano de un defensa rival. El árbitro no dudó en sancionar la pena máxima y Mario Balotelli tampoco dudó al marcar.
En la celebración, el polémico delantero italiano movió sus manos para provocar la reacción del vencido portero. Más allá de los autores de los goles y de lo emotivo que resultó ser el compromiso, la gran figura fue el portero ingles, Joe Hart, quien con sus determinantes atajadas fue el único responsable de que el partido terminara así.