Daniel Con goles de Messi, Suárez y Neymar, el Barcelona se impuso (6-1) ante el París Saint-Germain, en los octavos de final de la Champions League.
Empujados por los más de 80.000 espectadores que se dieron cita en el Camp Nou y por la ilusión de buscar la épica remontada, los catalanes salieron decididos a imponer condiciones y eso le permitió a Luis Suárez (3 minutos), ponerles rápidamente en ventaja. Centro de Rafinha, el balón quedó suelto en el área parisina, Messi la luchó con Verratti, el portero dudó, Suárez saltó y lo peinó sobre la salida de Trapp.
Con esa diferencia mínima y con la supremacia de los azulgranas en todos los aspectos del juego transcurrió la mayor de un primer episodio que, en todo caso, vio como un autogol de Layvin Kurzawa (40 minutos), aumentó la cuenta en el tanteador del Barcelona. Iniesta llegó a línea de fondo por la izquierda, metió un balón al área, que se iba a ir fuera, y Kurzawa despejó a su propia portería. Increíble acción del lateral francés que aumentó la ilusión de los locales antes del descanso.
La dinámica del encuentro se extendió hasta la segunda parte y más precisamente hasta que apareció Lionel Messi (50 minutos), para convertir todo en goleada. Meunier se cayó en el área, no llegó y tocó con la cabeza a Neymar, que estaba encantado de tropezarse con ella. El árbitro dudó en sancionar la pena máxima, pero uno de sus asistentes lo ayudó para que lo pitara. El que no dudó fue Messi con un remate potente pegado al palo derecho.
Parecía que llegaba la remontada histórica de los españoles, sin embargo, reaccionaron los franceses por intermedio de su goleador Edinson Cavani (minuto 62), que acabó con la ilusiones de los hinchas. Dejada de cabeza para Cavani en el corazón del área, falló Rakitic en el despeje y el uruguayo fusiló de volea a Ter Stegen. Baldado de agua fría para un Camp Nou que se enmudeció con el gol del charrúa.
Todo apuntaba para que clasificara el PSG, pero en el último suspiro del compromiso aparecieron Neymar Júnior (minuto 88 y 90) y Sergi Roberto (minuto 90+5), para sentenciar el electrónico en favor del Barcelona. Este resultado se suma al del partido de ida (4-0) y le permite a los dirigidos por Luis Enrique darle vuelta a la serie, avanzar a los cuartos de final y mantenerse en camino por el título continental. Por su parte, los hombres de Unai Emery se marchan con las manos vacías cuando tenían todo a su favor.