Daniel Recuperar su nivel, brillar en la Champions y volver a ganar títulos, son algunas de las metas que tendrá que alcanzar el atacante colombiano.
Hace unos días por fin se ha confirmado a Radamel Falcao García como nuevo jugador del Chelsea. Después de varias semanas de especulaciones, finalmente el cuadro londinense ha anunciado a través de sus redes sociales la incorporación del ex-Manchester United para la próxima temporada. Así las cosas, vale la pena revistar cuáles serán los grandes retos que tendrá el atacante samario en su llegada al conjunto blue.
✔ Volver a ser el Tigre
Uno de los principales retos de Falcao en su nuevo equipo es volver a mostrar ese tesón y garra que lo hicieron merecedor del apodo del ‘Tigre’. En la última temporada, Radamel estuvo muy lejos del área, por lo tanto del gol. Fue sacado de su hábitat natural y eso le costó en gran medida en su capacidad goleadora.
✔ Jugar y brillar en Champions League
Muchas veces se criticó a Falcao por huirle a la Liga de Campeones, en las últimas temporadas cambió de equipo antes de participar en el torneo más importantes de clubes en el mundo. Ahora esta es su posibilidad de demostrar que todo eso fue por azares del destino. Con el Chelsea campeón de la Premier, Radamel volverá a jugar en la competencia europea, tras no hacerlos desde su época gloriosa en el Porto.
✔ Volver a ganar títulos
En todos los equipos donde ha brillado el colombiano, también ha ganado títulos. Y no solo eso, los ha ayudado a conseguir a punta de trabajo y sobre todo goles. Ahora, Falcao en Chelsea tendrá la oportunidad de volver a su mejor nivel ayudando al equipo de Mourinho a conseguir grandes cosas, títulos sobretodo.
✔ Demostrar que es apto para la Premier
Durante su estancia en el Manchester United, la dura prensa inglesa criticó mucho a Falcao García asegurando que no era un jugador apto para la Premier League que corría tras el balón más de lo que aportaba al equipo de Louis Van Gaal. Ahora en Chelsea tendrá la oportunidad de demostrar que estaban muy equivocados y que su nivel y disposición en la cancha obedecían a las órdenes y tácticas del excéntrico entrenador holandés.