Daniel Un insólito retraso en la documentación del confirmado traspaso ha estropeado la llegada del guardameta español al conjunto merengue.
En medio de mucha polémica y con varios movimientos inesperados se ha vivido el último día de mercado en Europa. Los equipos esperaron hasta último momento para incorporar jugadores y por eso hemos tenido una jornada trepidante marcada por un escándalo que tiene como protagonistas a dos de los equipos más poderosos del mundo.
Se trata nada más y nada menos que de Real Madrid y Manchester United, dos clubes que se han convertido en la burla del mundo entero por culpa de un insólito error administrativo que terminó estropeando los fichajes de David De Gea y Keylor Navas. Cuando todo estaba listo para que ambos porteros intercambiaran de equipo una demora en la documentación impidió que la UEFA aceptara este par de transferencias que finalmente han sido anuladas.
A las 23:59 de España, en el último segundo, como amenazó Van Gaal y se temía el Real Madrid, aún se esperaba el final feliz, pero dicho final no llegó. Minutos antes de la medianoche, Keylor Navas, el otro afectado en la polémica operación, llegaba al Santiago Bernabéu en compañía de su representante. Revisaron el nuevo contrato con el conjunto inglés y pidieron hacer algunas modificaciones.
El caso es que entre unas cosas y otras, el tiempo se les echó encima a todos los implicados y las campanadas de medianoche anunciaron el peor desenlace posible. La documentación no había llegado a tiempo —el Madrid mandó el contrato del meta a la LFP a las 00:30 horas y se le contestó que no procedía porque estaba fuera de plazo—. Ni De Gea ficha por el Madrid, ni Keylor por el United.
Al filo de las 14.00 horas, el Madrid y el Manchester se sentaron a negociar por De Gea. Los ingleses aceptaron rebajar sus pretensiones: 30 millones de euros y el compromiso de hacer la operación de Keylor Navas de manera paralela pero independiente. El traspaso de Keylor Navas al Manchester United había sido durante toda la jornada casi más complicado que el de De Gea por la negativa inicial del costarricense a marcharse. Finalmente, había accedido a su traspaso rumbo a la Premier, pero todo cambió en el último instante.